Hay un momento en el camino a manifestar a tus sueños que es fundamental, se conoce como la “Ley del desapego”. Cuando aprendes a ser feliz, y a tener paz en tu vida, independientemente de que tengas aquello que anhelas o no, sucede el desapego. A mí, el Universo siempre me ha ayudado a manifestar y a soltar lo que deseo. En la noche del concierto de The Killers, luego de hacer mi mayor esfuerzo para tocar con la banda, The Killers eligió a otro músico para tocar con ellos. Al tiempo que miré subir a ese otro músico subir al escenario y tocar con la banda solté toda expectativa de tener lo que deseaba. Fue en ese momento cuando la vida me hizo soltar mi sueño. No niego que sentí tristeza, pero también sentí mucha paz, porque sabía que había dado lo mejor de mí y hecho todo lo que estaba a mi alcance, para tocar con ellos. No obstante la vida sólo me enseñó a soltar, pues el músico mexicano que subió no estaba preparado y no había ensayado la canción. Entonces fue allí, cuando Brandon Flowers me señaló y me dijo que subiera al escenario.

Había gente esparcida como luciérnagas en el Foro Sol, un manto de voces  gritando, eufóricas, alegres, excitadas, se extendía bajo el cielo nocturno,  junto a  cientos de pequeños destellos de luz que bordeaban el escenario. Las vibraciones del bajo y la guitarra despertaban una sensación de tensión en el ambiente, cual redoble de tambores. 65 mil personas aguardaban con expectativa por mí, yo era el segundo baterista que subía al escenario para tocar con The Killers en la Ciudad de México esa noche. ¿Podría tocar la canción ForReasons Unknown en la batería? Al subir al escenario saludéal vocalista Brandon Flowers, y me senté frente a la batería de Ronnie Vanucci, baterista de la banda proveniente de Las Vegas, Nevada. Con una ligera señal de Ronnie comencé a tocar la canción, como lo había practicado tantas veces en mi habitación, y el Foro Sol se expandió en miles de aplausos al momento que los músicos tocan  al unísono, junto a mí, en la batería. Tocar con The Killers es similar a la sensación que refleja la película de interestelar, sentí que ya había vivido junto a ellos ese momento.

The Killers es mi banda preferida de toda la vida, me considero un músico profesional y un gran fan, no sé si tocar con ellos era igual de importante para todos los bateristas que deseaban subir a tocar la batería, pero era un sueño de toda la vida para mí. Pensaba que nunca se haría realidad hasta el momento en el que anunciaron su concierto en México para ese jueves 4 de abril de 2018.

Estuve ensayando la canción de For Reasons Unknown por 3 meses aproximadamente, diariamente, por más de dos veces al día. Muchas veces llegaba a casa a practicar la canción. Es una rola que en algún momento de la vida me gustó muchísimo y ponía una y otra vez la canción. También entrevisté a otro baterista que había tocado con The Killersen una de sus giras, y supe que no era imposible. Si otros músicos ya lo habían hecho, yo también lo podía lograr. Cuando un humano logra algo, eso que ha logrado es posible para el resto de la humanidad. Tocar con mi banda preferida era posible porque ya lo habían hecho otros bateristas, no importa qué tan difícil pudiera ser, si alguien pudo hacerlo yo también podría hacerlo cuando ellos estuvieran en México. Al subir al escenario, Brandon me preguntó mi nombre, si había ensayado la canción y me preguntó si era de la Ciudad de México.

Después del concierto de The Killers todos los medios de comunicación mexicanos me contactaron, algunas veces daba entrevistas hasta después de la media noche, porque era el tiempo que tenía para conceder entrevistas. Pensé que pescaría algún proyecto grande o conocería productores que me contratarían para trabajar en los estudios de grabación, pero me cerraron las puertas en muchos estudios. La experiencia de tocar con The Killers no me abrió puertas, pero me abrió panoramas, maneras de ver la música, me hizo ver que eso era lo que quería hacer por el resto de mi vida, seguir tocando y hacer música. En  ese momento, hace 4años, me faltaba mucho nivel como baterista y viví una caída de montaña rusa. Llegas a la cima y después viene la bajada, actualmente estoy en búsqueda de volver a subir a la cima.

El abismo vino después de la caída de la cima, después de tocar en el Foro Sol y ser entrevistado por los medios de comunicación de todo México. No me daba tiempo de guardar a todos los contactos y responderle a todos los periodistas, fue un frenesí que duró varios meses. Luego de un tiempo, dejé de estar bajo el foco de las miradas. Como artista sabía que ese momento iba a venir entonces me preparé lo mejor que pude. Sí ha sido difícil lidiar con ello pero trato de salir adelante, sé que si pude llegar a hacer eso puedo hacer mucho más. Es una experiencia que voy a llevar el resto de mi vida, de hecho lo incluyo en mi currículum. Ahora mis planes son volver a tocar en un foro tan grande y en realidad cualquier forma de vida en la que pueda vivir de la música, es un objetivo en mi vida. No me imagino haciendo otra cosa que no sea música.

Por motivos desconocidos, las luces del Foro Sol destellan sobre mí, y yo me mantengo con el corazón desbocado tocando la batería. Cuando las luces se apagan continúo dándole a las banquetas, hasta que un movimiento inacabado de mis manos frenéticas desemboca el silencio, y evapora las miles de personas ahora silentes que me miran en el escenario.  Cuando realizo viajes astrales regreso a ese lugar, para volver a tocar el sonido del éxito en la batería. Ahora las luces del Foro Sol permanecen apagadas. Abro los ojos y me encuentro en la sala de mi casa, sentado en posición de loto, padmasana, sobre mi mat de yoga.

Realizo viajes astrales, soy una persona espiritual y serena, lo que me permite mantener mi mente concentrada en mis metas. Continúo haciendo música, manifestando mis sueños e ignorando que el Universo ya los ha concretado en mi futuro ideal. Toda línea de tiempo es una única sucesión de diversos momentos de mi vida, como lo fue la noche que toqué con The Killers. Me encuentre haciendo música o no, ella viaja por infinitas ondas sonoras e inunda mi mente de dopamina, me transporta a ese lugar del inconsciente donde la inercia domina mi vida y la razón se mantiene doblegada por la sabiduría. Al terminar con la batería tengo la impresión de que han pasado horas. Cuando vivía con mis padres la vecina siempre se quejaba por el ruido del la batería. Le exigió a mis padres que sólo podía tocar una hora al día, una hora en la batería son como dos respiraciones profundas haciendo meditación. Necesito tocar mínimo cuatro horas diarias. Por eso decidí mudarme, para ser músico y concentrarte en tu carrera la libertad es el único ambiente para sembrar en tierra fértil tus proyectos.

Además de prepararme profesionalmente y ensayar en la batería cuatro horas diarias para tocar con la banda, me visualicé en el Foro Sol desde todos los aspectos. Estuve ensayando la canción de For Reasons Unknown por 3 meses aproximadamente, diariamente, por más de dos veces al día. Muchas veces llegaba a casa a practicar la canción. Es una rola que en algún momento de la vida me gustó muchísimo y ponía una y otra vez la canción. Viví For Reasons Unknownen pijamadas con mis amigos, colocaba la canción siempre, todo el tiempo. Mi hermano, mi mamá, conocían la canción perfectamente gracias a mí porque no dejaba de escucharla. Al llegar al concierto mi cartel era más grande que el promedio, todos llevaban una cartulina y yo llevaba dos cartulinas pegadas. Yo sabía que tenía que ser un cartel muy notorio para que la banda lo leyera desde el escenario y me llamaran.

Llegué al concierto de The Killers a las cinco de la mañana. Sabía que si quería tener alguna oportunidad de tocar con ellos en el escenario, debía estar en el medio o el frente, para ser visto en el momento que subieran a alguien. Decreté por mucho tiempo que lo lograría, a Dios y al Universo. Creo en un Dios como un poder superior y me considero una persona ecléctica. Cuando subió el primer chavo a tocar la batería sentí mucha tristeza, mucha desilusión, pero al mismo tiempo sentí paz, en ese momento entendí que ya no dependía de mí, y pude soltar la responsabilidad de mis sueños, ahora sólo quedaba en manos del Universo arreglar las piezas para hacer que yo fuera el músico mexicano que tocara junto a ellos esa noche, y así fue.

Luego de realizar este último viaje astral, tomé un vaso con leche y las galletas que me preparó mi abuela Antonia, vino de Oxaca a visitar a mi familia, a mi abuela le encanta  cocinar para mí, aunque ella no lo admita frente a mi hermano, soy su nieto preferido. Escribí en mi diario con la fecha de hoy 13 de Noviembre de 2021. No puedo viajar a través del tiempo, sólo de las dimensiones del espacio. En definitiva cuando estudias metafísica y aprendes a manejar tu cuerpo astral como una fuente de poder, entiendes que en esencia el ser humano puede materializar cualquier sueño. Mientras tanto aprendes a observar con mayor atención tus sueños, tus metas, y también los sentimientos de las personas a tu alrededor.

Normalmente quemo todas las páginas de mi diario luego de escribirlas, considero que la persona que soy hoy, mañana habrá cambiado y nunca soy el mismo. No obstante las primeras páginas que escribí permanecen intactas, pues describen una parte de mí que es trascendental y permanece leal a mi esencia. Todavía, a día de hoy, puedo leer y reconocerme en esas letras:

“Mi nombre es José Luis Hernández pero muchos me conocen en México y Latinoamérica como “el baterista mexicano que tocó con The Killers”. Lo cierto es que la música ha estado presente en mi vida desde mucho antes de conocer a los Killers. Mido 1,70 y no soy propenso a quedar calvo. Soy huraño pero no payaso o mamón, me considero amable. Los lentes los uso para ver detalles y mirar de lejos, mi idea era quitármelos al subir a tocar con The Killers pero se me olvidó; y  me los quité a mitad de la canción.  Como músico tuve un oído musical bastante privilegiado y desarrollado por mi papá que siempre le ha gustado escuchar  New Ages, Blues, Música Clásica y Ópera.  Mi mamá no estudió una carrera relacionada con el arte, ella solo quería conseguir un trabajo como asistente ejecutiva en una empresa de telefonía, se jubiló y ahora descansa. Mi madre disfruta escuchar cumbias. A mi abuela Antonia le encanta escuchar la música que compongo, mi abuela es servicial, ocurrente y muy dulce. Vivir en casa de mi madre interfiere con mi formación musical pues los vecinos se quejan por el ruido, y ya el espacio se me hizo pequeño; por  lo que decidí irme a vivir solo durante la pandemia del covid 19.”

Ese soy yo, José Luis el baterista, ayer, mañana, y siempre. Tras quemar la página de mi diario escrita hoy, esparcí las cenizas por la ventana como un ritual espiritual cotidiano. Me serví un cappuccino endulzado con un toque de miel y tomé una ducha antes de irme a clases.  Estudio la Licenciatura de Músico y Composición en Arreglo Musical en La Escuela Superior de Composición y Arreglo Musical en Ciudad de México.

No sé si te ha pasado,  pero hay canciones que escuchas y entras en un viaje, te trasladas a momentos determinados de tu vida. Yo recuerdo que ya estaba en la Universidad, era mi primer semestre de la Carrera de Química. Para mí era algo muy nuevo despertarme a las cinco de la mañana para ir a clases, y me bañaba escuchando las rolas de Read my mind y When You Were Young. Era mi ritual para darme ánimos y elevar mi vibración en mi rutina diaria. En la Universidad tuve una relación con una chica que también era fan de losKillers. Yo tenía 21 años y a los 21 años estás forjando lo que va a formar parte de ti por el resto de tu vida.  21 años, enamorado y escuchando todo el tiempo The Killers. Ellos definitivamente me enseñaron a elevar mi vibración y expandir mi energía a través de su música.

Cuando estudiaba Química en la Universidad yo continuaba haciendo música. Estaba avanzado en la carrera de Química, conseguí un trabajo como gestor de calidad en procedimientos para una empresa y trabajé en muchos laboratorios,  fue precisamente trabajando donde me di cuenta que no podría continuar en ese trabajo durante el resto de mi vida. Solía pensar “Esto lo voy a hacer un rato porque después lo voy a dejar y me voy a dedicar a la música”. Tenía una banda cuando estudiaba la Carrera de Química, hacíamos algo. Fue durante ese último viaje de trabajo,  en Baja California en una planta de Pepsi, cuando me tuve que alejar por completo de la música. Sin mi banda allá, sin ningún instrumento y en la planta todo el día trabajando, sentí un gran vacío. Entendí que no podía perder ni un minuto más que no fuese dedicado a la música. Fue allí cuando tuve una epifanía y tomé la decisión de dejar la Carrera de Química.

Sin dudas, tuve mucho miedo, a día de hoy ya no tengo miedo. Todo buen estudiante de metafísica sabe que el miedo y la duda son los enemigos de la manifestación, y mi vida está encaminada hacia alcanzar  el éxito en la música. Cuando toco la batería el ruido desaparece y el único sonido que importa es el que construyo con mis manos. Algunas veces en lugar de tocar la batería produzco alguna canción, tengo un estudio donde produzco mis canciones y escribo música, realizo trabajos de mis estudios para obtener la Licenciatura en Composición y Arreglo Musical. Parte de mi trabajo es componer música, transcribir partituras, de todo tipo, no solamente lo que me gusta sino lo que me permite mantenerme y me da trabajo gracias a la música. He tenido algunos trabajos que me han permitido ahorrar para sostenerme económicamente, aunque obviamente el ahorro en algún punto se acaba, pero gracias a mis ahorros he realizado grabaciones. Trabajo con artistas, les doy orientación, los grabo, trabajo con variedad de artistas y géneros, de rock, pop, reggaetón e incluso música cristiana, grabo todo en mi estudio.  Asesoro a mis clientes en sus demos, covers y ofrezco supervisión profesional en su música. Los estudios de la Universidad los estoy  llevando en línea, a causa de la pandemia, es muy difícil estudiar música en línea, la conexión principal con el instrumento es donde reside la magia.

Además de la música soy un gran amante del cine, esa mañana al tomar un baño para ir a clases, pensé en el rumbo que había tomado mi vida en los últimos años, en especial después de tocar con The Killers. Recordé la película“Quisiera ser millonario”, todos los sucesos del protagonista lo llevaron hacia su gran sueño, vivir junto a su gran amor, Latika. Luego de rendir mi examen de partituras avanzadas, en la Escuela Superior de Composición y Arreglo Musical llegué a casa a trabajar en mi estudio y al atardecer medité.

Mi energía, si soy sincero, es muy inestable, más que temperamental tiendo al overthinking. Conecto conmigo mismo, y la energía del ser superior a través de la meditación y el servicio. Para meditar tengo la mejor disciplina pues en la música si no tienes disciplina no llegas a ninguna parte.

Me quito mis lentes de lectura, cierro los ojos, respiro, realizo un viaje astral. El tiempo es sólo una sucesión de recuerdos pasados y momentos futuros que se unen en el presente, el tiempo es realmente una ilusión como lo representan en la película de Matrix. Regreso al Foro Sol y vuelvo a tocar con The Killers .Por alguna razón siento que estoy tocando con ellos una canción distinta, y que por primera vez viajo hacia el futuro, pues la confianza y el conocimiento que siento al tocar la batería, es algo que no he experimentado, toco una de sus canciones nuevas.

A la mañana siguiente conduje hacia una Hacienda de Alcohólicos Anónimos en las faldas de un Volcán. No soy alcohólico, pero me gusta ayudar en todo lo que necesiten, lavando trastes, limpiando baños, sirviendo café, mi abuelo es alcohólico y eso me permitió desarrollar la empatía y el servicio. Al encender la radio del coche escuché en las noticias que la banda The Killers anunció nuevos  conciertos para México en el 2022, tocarán en tres ciudades. Inaugurarán sus presentaciones en México el 26 y6 el 277 de Abril de 2022 en la Arena de Monterrey, después pisarán el escenario del Foro Sol en la Ciudad de México, el próximo 29 de abril, y el 1ro de Mayo estarán en Guadalajara…escucho la voz la voz de la periodista, al tiempo que mantengo las manos en el volante, la vista fija en el horizonte y el sol brillando a cenit. Escuchar esa noticia precisamente en el momento que encendí la radio es lo que se conoce como el principio de correspondencia. Conduje y escuché The Killers durante todo el camino